Hoy, nuevamente me sorprendí, me he dado cuenta lo rápido que pasa la vida y lo importante que es comprender que cada momento de la vida, pasará y no se repetirá.
RENATA tiene casi 50 días, ha duplicado su peso y sigue creciendo y creciendo.... El tiempo es inexorable y cada minuto que pasa tengo menos tiempo para disfrutar la vida....
Regina me divierte cada día disfruto de su compañía, sus sonrisas y sus ocurrencias, he descubierto que ella va muy de prisa y que tengo que correr para entenderla.
Ambas niñas, son Herencia de mi Padre... Gracias buen Dios...